Abre un camino de aprendizaje más individualizado, contribuyendo a una formación centrada en el alumno, donde los estudiantes son participantes activos en su propio proceso de aprendizaje. Nuestro enfoque se basa en el aprendizaje ágil para tratar a los alumnos de forma individualizada, situándolos como elemento principal de todo el ciclo formativo.

Gracias a su metodología personalizada, el proyecto ofrecerá oportunidades de formación a grupos objetivo en diferentes etapas de su vida: estudiantes, jóvenes adultos, adultos desempleados y personas de entornos desfavorecidos, permitiéndoles gestionar la transición al mercado laboral. Nuestro modelo de formación basado en la justicia educativa es un paso importante hacia la mejora de las competencias de las personas con mayor riesgo de desempleo, pobreza y exclusión social, contribuyendo así a la construcción de comunidades inclusivas en Europa